El anuncio del Presidente de la República, Alan García Pérez de presupuestar para el año 2012 la construcción de la II Etapa del Centro Penitenciario de Cantera, ubicado en el distrito de Nuevo Imperial, ha sido tomado por la comuna local como un acto de venganza del saliente mandatario contra la Cuna y Capital de Arte Negro que en un determinado momento de su gobierno salió a las calles para defender la creación de su Universidad Nacional.

La opinión pública, cañetana resumió que García Pérez, todavía no asimila el duro golpe que el pueblo de Cañete le dio en diciembre del año 2009, cuando abiertamente se negó a firmar la promulgación de la Ley de Creación de su propia Casa de Estudios.

“Alan García debió preocuparse mas en que los cañetanos hagan realidad la construcción de su Hospital Regional y su Ciudad Universitaria, como si lo está haciendo en Barranca”, comentaron en la vía publica.
Para el ciudadano de a pie, esta decisión adoptada por el Jefe del Estado a pocos días de dejar el cargo, es simplemente un acto de venganza.

Expresaron que Cañete no quiere la ampliación del penal que al final servirá para el traslado de delincuentes de alta peligrosidad provenientes de la ciudad de Lima y otras partes del país.
A una sola voz, se comentó que los cañetanos no pueden permitir que el Ministerio de Justicia continúe ampliando penales para traer gente de otro lado y a los internos del lugar llevarlos a otro sitio alejándolos de sus familiares.

“Que los delincuentes de Lima y Callo se queden en su zona señor Presidente de la República”, acotaron, tras indicar que la ampliación del Penal de Canteras a mediano y largo plazo promoverá el crecimiento de la delincuencia en el sur de la Región Lima.

 

 

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