Después de tres jornadas de disturbios y vandalismo, los desmanes ya cobraron su primera víctima fatal.
Mark Duggan, el hombre asesinado el jueves pasado por la Policía, y cuya muerte inició la oleada de disturbios e incidentes en Londres y otras ciudades de Inglaterra, perdió la vida como consecuencia de un único disparo en el pecho.