El showman y conductor del programa radial “Caídos del catre”, Carlos Galdós, contó que gracias a la terapia que sigue hace un tiempo ha logrado dormir como no lo hacía en años y que, ahora, cuando se va a la cama está “limpio, feliz, con mi balde vacío”, porque no está en la época de guardarse cosas.
“Todo el mundo debería hacer terapia, pero aquí en nuestro país existe la mala idea de que si la hace es porque estás loco. Yo la hago porque quiero entender muchas cosas (…) Ya puedo dormir y lo conseguí con la terapia, no he dormido en años, porque tenía algún barullo en el cabeza”, indicó en el microprograma de TV “Cinco minutos”.
Además, Galdós indicó que mucha gente mata por ser escuchado y que en su caso, le parece una bendición y maravilla que el público pague por escucharlo a él.
“Indudablemente (mis shows son como una terapia), pero eso es bueno, porque la gente sabe que en mis shows van a encontrar un tipo honesto, un tipo que se pela en el escenario, que utiliza recursos actorales para comunicar. Finalmente, voy a cantar, bailar, me voy a desnudar”, agregó.
“ES DIFÍCIL SER UN CAÍDO DEL CATRE AQUÍ”
En otro momento, el showman señaló que “es muy difícil ser peruano y ser un caído del catre”, porque “tenemos un olfatillo, esencia y espíritu” únicos.
Para concluir, dijo que le ha costado ser feliz y que actualmente se siente así con sus show, su programa de radio y su columna en la revista “Somos”, donde afirmó que literalmente se está mostrando tal cual es, sin ningún tipo de filtro.