Este viernes 18, el Papa Benedicto XVI denunció que los valores cristianos están debilitándose progresivamente en todo el mundo actual. “En esta época, la fidelidad al Evangelio puede costar cara a los creyentes”, declaró.

El Papa hizo estas manifestaciones ante un grupo de obispos de EEUU de rito oriental e hizo votos para que el Año de la Fe, que ha convocado él y comenzará el 12 de octubre próximo con motivo del 50 aniversario del Concilio Vaticano, «despierte» de nuevo la fe en la comunidad cristiana.

«Con el progresivo debilitamiento de los valores cristianos tradicionales y la amenaza de un tiempo en el que nuestra fidelidad al Evangelio nos puede costar cara, la verdad de Cristo no sólo tiene que ser comprendida, articulada y defendida, sino también propuesta con alegría y confianza como clave de la auténtica realización humana y el bienestar de la sociedad», dijo.

Benedicto XVI también elogió el compromiso de aquellos para lograr una reforma de la ley de inmigración en EEUU. Además, remarcó la necesidad de garantizar un trato justo a los inmigrantes y defender su dignidad.